Ya os anunciábamos hace unos días que la nueva normativa de la Fórmula 1 iba a traer cola… y vaya si la ha tenido. Los problemas que tuvieron las grandes marcas durante el primer gran premio han hecho que muchas de las partes implicadas hayan mostrado su descontento sobre la actual situación de la fórmula 1. En este artículo de hoy haremos un resumen de por qué la Fórmula 1 no gusta a nadie y como lo han expresado a la prensa de todo el mundo.
Empezamos por las acusaciones de toda Australia por la sanción que se le impuso a Daniel Ricciardo. Ricciardo es el nuevo ídolo de Australia y la descalificación sufrida en el Gran Premio sigue siendo incomprensible para los ciudadanos del país. De hecho, la sanción es bastan enrevesada y difícil de entender hasta para los entendidos de este deporte. La FIA está en un lío tecnológico bastante grande y no sabe muy bien por donde salir.
Otro ejemplo del descontento vivida con esta nueva fórmula 1 es el de las televisiones y espectadores, los cuales no identifican ese nuevo sonido que hacen los coches con el típico sonido de este deporte que todos conocemos muy bien. De hecho se oyen voces de directivos que han solicitado a Ecclestone que o cambia la situación o rescindirán el contrato televisivo pues ellos «pagaron por una cosa que no se les dio».
Y por último nos toca hablar de Ferrari y su crítica, en este caso a ellos mismos. La marca de Maranello no está nada contenta con su inicio de temporada y los fallos en las últimas temporadas hacen que el equipo no pueda cometer más fallos si quieres seguir siendo un equipo grande. James Allison, quien es el nuevo director técnico de Ferrari, afirmó que «la competitividad del coche en Melbourne no es aceptable». Alonso, por contra, ha afirmado que todavía hay mucho tiempo para arreglar esta situación.
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