Ampliamos la noticia que hemos ido difundiendo a través de nuestras redes sociales sobre el crítico estado de salud de Michael Schumacher tras su caída mientras esquiaba con su hijo. La situación actual es estable pero en el día de ayer no se produzco ninguna mejoría en su estado de salud. El piloto sigue monitorizado y vigilado por los médicos, aunque la situación no es tan grave como el primer día tras su accidente, los médicos siguen siendo prudentes.
El impacto que recibió el ex piloto de fórmula 1 fue tal que la roca con la que impactó rompió su casco. De no haber llevado este accesorio tan necesario, Schumacher no habría tenido opciones de sobrevivir. El accidente se produjo mientras Michael esquiaba fuera de pista con su hijo. Rápidamente fue trasladado al hospital e inducido al coma por los dolores que le produjo el fuerte golpe en la cabeza.
En el hospital no paran de llegar fans del ex piloto. Tal es la cantidad de personas que llegan hasta el centro hospitalario, que se está pensando en reducir el peso mediático de la noticia para evitar así que sigan llegando. Estamos ante un hospital que recibe cada día cientos de pacientes y que ha visto alterada su normalidad con el ingreso del ex piloto. La presencia de la prensa, agolpada a las puertas del hospital cuando sale un nuevo parte médico, también está impidiendo que el día a día del hospital se desarrolle con normalidad.
Casi con total seguridad hoy recibiremos un nuevo parte médico sobre el estado de salud de Michael. Ayer no hubieron noticias y todo parece indicar que de los partes cada hora se pasará a los partes cada dos-tres días por los motivos antes mencionados. Desde aquí mandar todo nuestro apoyo a uno de los pilotos más laureados de todo el mundo del motor, que curiosamente hoy cumple 45 años.
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