A principios de esta semana Karim Benzema, jugador del Real Madrid, publicó en su cuenta de Instagram un vídeo en el que se le puede ver, entre otras cosas, paseándose en un Rolls Royce y un Ferrari. Las imágenes se corresponden a las vacaciones de navidad, que Karim y unos amigos pasaron en la ciudad de Dubai.
Como se puede ver en el vídeo, Benzema no perdió el tiempo durante su estancia en Dubai. Podemos verle bailar en algún club nocturno de la ciudad y podemos verle lucir dos espectaculares automóviles: un Rolls Royce Phantom blanco y un Ferrari 458 Spider amarillo (aunque en el vídeo parece blanco al ser de noche).
Como ya sabemos, Benzema es un gran aficionado a este tipo de vehículo. De hecho, también le hemos visto acudir a las instalaciones de Valdebebas, lugar donde entrena el Real Madrid, al volante de un espectacular Bugatti Veyron.
Según hemos podido saber, además de lo que podemos ver en el vídeo, Benzema aprovechó sus vacaciones en Dubai para hacer un salto en paracaídas. La noticia ha estado envuelta en cierta polémica, pues al Real Madrid no le ha hecho ninguna gracia y le ha mandado un aviso al jugador. Conviene recordar que los deportistas de élite suelen tener cláusulas en sus contratos que les impide realizar otros deportes o actividades que puedan resultar peligrosas.
La afición de Benzema a los deportivos es casi tan conocida como la de su compañero Cristiano Ronaldo. De hecho, esta afición le ha granjeado más de un problema con la ley: multa por conducción temeraria en Ibiza y sanción de 18.000 euros y ocho meses sin carné tras ser pillado a 216 km/h por un radar de la M-40.
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