El jugador galés del Real Madrid, Gareth Bale, tiene uno de esos problemas que sólo los millonarios sufren. El “pobre” de Bale tiene problemas musculares y eso no es lo que le caracteriza como hombre rico, sino el hecho de haber culpado a los Lamborghini de ser los causantes de sus dolencias. Oír para creer.
Según Bale, su experiencia en el Auto Vivendi Super Club Car desde el pasado mes de julio le ha demostrado que cada vez que conduce uno de estos superdeportivos italianos ha notado cómo las dolencias van a más.
Desde luego no es la mejor publicidad para un club de pilotos que cuesta 45.000 euros al año y que ofrece la oportunidad de disfrutar de los mejores deportivos del mundo en Reino Unido. Ahora sólo falta esperar que esta problemática de 4 ruedas desaparezca y de verdad pueda demostrar en el terreno de juego su capacidad.
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