Los coches del futuro no necesitarán que los conduzcamos, sino que tan sólo tendremos que poner el lugar de destino, y podremos ir a cualquier sitio. Este es nuestro sueño, un sueño que antes veíamos en las películas pero que ahora ya no es ficción, es una realidad. De hecho muchas marcas ya están trabajando en ello para conseguir ser la primera en poner en el mercado un coche que conduzca de forma autónoma.
Los automóviles están avanzando a un ritmo vertiginoso. Desde que los coches empezaron a llevar incluidos unos microprocesadores hasta ahora ha habido una gran evolución. Han pasado de llevar 50 o 100 líneas de código cuando empezó a llevarlas el Cardillac Sevilla, hasta llegar a tener más de 10 millones como como el caso del Chevrolet Volt, además de los otros híbridos y coches eléctricos que también tienen una importante cantidad de líneas de programación.
Una prueba de que estamos muy cerca de este coche autónomo es que ya practicaron con el BMW Track Trainer, cuando probaron este coche en los circuitos de Mazda de Laguna Seca en Monterey, y vieron que el coche podía llegar a la velocidad máxima y frenando perfectamente. Todo esto lo hacía de una forma similar a la que se haría si un piloto profesional estuviera conduciendo con el mismo modelo de coche.
Estos nuevos coches, con la nueva función que tienen y los nuevos microprocesadores que llevan incluidos, van a tener la capacidad de ir a cualquier sitio sin tener que contar con el control de un conductor humano, solo tenemos que apuntar en un sistema GPS que está incorporado en el vehículo que visualiza en tiempo real todo lo que ocurre en la carretera donde estás circulando para que no hayan problemas, y nos podremos ir donde queramos.
Muchas empresas ya trabajan con esta tecnología. Quien consiga llegar hacia la tecnológia perfecta para la conducción autónoma, tendrá un gran éxito de ventas.
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